Me encantan las peliculas en blanco y negro donde un tipo absolutamente gris (que como buen occidental sabe nadar igual que un pez, un pez en un mar de mediocridad) acaba estallando en miles de pedazitos de rebelión (vease, matando a alguien). Poco importa lo muy perniciosas que son y lo mucho que reproducen tópicos absurdos sobre lo zorras que somos y el mal que les hacemos a los hombres (que siempre siempre siempre, matan por nuestra culpa).
Pero me encanta ver como aquellos hombres bajitos y aburridos cogen el cuchillo. Como sube la tensión. Como disfrutan mas de lo que habian disfrutado nunca, trabajando en un banco, en una agencia de seguros. Como lo clavan en los demas con la esperanza de matarse a si mismos, por todo lo que son, por haberse engañado tanto, porque nunca nunca nunca ella se habria fijado en ellos.
Necesito sublimar mis malos deseos.
Y después esta el último cd de Nacho Vegas. Que me hace sentir exactamente lo mismo. (Aunque el no nada en un mar de mediocridad, él ya quiere nadar en un mar de tragedia, que todos sabemos que es mucho mejor). "Todo el mundo fantasea con una muerte dramática" ¿Qué mejor declaración de intenciones?